Equipo de Open Americas, Traducido por William Giller
El lunes, 12 de febrero, la Casa Blanca presentó su proyecto de presupuesto para el año fiscal 2019. Este documento no solo propone una drástica reducción de los presupuestos americanos para subvenciones a Latinoamérica, sino que también aumenta los gastos para la defensa y la infraestructura nacional.
Open Americas cree plenamente que cualquier presupuesto refleja los valores políticos y personales de sus creadores. Las mismas firmes ideas sobre el nativismo, militarismo y excepcionalismo estadounidense publicadas en el documento para 2019 están también integradas en las decisiones políticas, las cuales perjudican a los pueblos a lo largo de las Américas.
Respecto a la relación que los Estados Unidos comparte con Latinoamérica, el presidente Trump ha pedido aproximadamente $16 mil millones de dólares para construir un muro de 65 millas a lo largo de la frontera tejana-mexicana y aproximadamente $990 millones de dólares para contratar a 2.750 agentes ICE y de Patrulla Fronteriza. En este mismo proyecto, el presidente aboga por un recorte de $19 mil millones de dólares de subvenciones a Latinoamérica, lo que reduce la capacidad de los Estados Unidos de lograr sus propios objetivos regionales.
En este proyecto de presupuesto, los recortes en ayuda internacional serían particularmente devastadores para aquellos países que se benefician de la ayuda humanitaria tras ser azotados por desastres naturales, y las cuentas para los fondos de salud global y ayuda alimentaria se verían reducidas drásticamente. Los recortes de tales programas demuestran una falta de conocimiento sobre lo que ha sido la misión de los Estados Unidos en el extranjero en los últimos años.
“Los Estados Unidos recuperan su protagonismo. Un gran espíritu de optimismo sigue extendiéndose a través de nuestro país. Los estadounidenses pueden volver a tener plena confianza que nuestros días más brillantes están por llegar,” afirma Trump en la introducción del documento.
Pero no nos engañemos. Sólo una minoría selecta está ganando en este nuevo juego. Con el cambio constante de las reglas, aquellas personas que pierden son castigados, y los Estados Unidos como conjunto no pueden ganar sin abogar por el bienestar de todos sus ciudadanos, ciudadanos aspirantes, y vecinos.
Aunque es poco probable que se financie el proyecto de presupuesto en su totalidad, puede que los valores que este promueve indiquen un futuro incierto. Aún así, los políticos, académicos, grupos sin ánimo de lucro y la sociedad civil están preparados, todos juntos, para enfrentarse al futuro incierto que se avecina.
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